Abelo Valis: «Mi mejor obra soy yo»

Begoña Rodríguez Sotelino
begoña r. sotelino VIGO / LA VOZ

VIGO

Oscar Vázquez

El diseñador y actor, ourensano de nacimiento y vigués por convicción, despunta en el cine tras rozar los Goya por la última película de Jaime Chávarri mientras se empapa de cine y literatura

27 dic 2023 . Actualizado a las 05:00 h.

Cuando decidió que iba a hacer todo lo que estaba en sus manos para que la creatividad inundase todas las facetas de su vida, Abelo Valis comenzó por su nombre. No se llama así, pero así es como quiere que le llamen, un nombre que, a su vez, es una marca, la que él avala cada vez que pone en circulación los objetos o prendas que diseña.

Aunque nació Ourense, «en Ribadavia», concreta, Abelo ha decidido ser de Vigo esté donde esté y ponga lo que ponga su DNI, porque de todos los lugares por los que ha pasado, desde los 30 años que cumplirá pronto, «es el lugar donde mejor me siento», asegura, orgulloso de la ciudad que lo acoge desde hace casi un lustro. «Vigo es mi casa y mi mejor obra soy yo», afirma.

La música fue su primer amor. «Comencé cantando con 14 o 15 años, teníamos un grupo aquí que se llamaba Banana Bahía Music. Trabajamos un montón con C. Tangana y estaba también otra gente como Kaixo, Elecésar, Royce Rolo...», enumera. La música me llevó al diseño, y el diseño, al cine, a ver mucho cine. Para mí todo el arte está relacionado, sea diseñar, hacer una canción o una película, forma todo parte de lo mismo», argumenta.

Pero Abelo no se muestra arrogante respecto a un aprendizaje que no pretende esquivar. Es concienzudo y disciplinado, así que cuando quiso dar el santo a la interpretación, lo primero que hizo fue matricularse en la Escuela de Arte Dramático de Galicia (ESAD), que tiene su sede en Vigo. «Decidí formarme como actor y eso hice, pero soy un superviviente, soy un artista que trabaja en mil cosas, hago un montón de historias diferentes, todos los días son lunes para mi, currando todo el rato como un loco», asegura el actor, que admite con humor que «algún viernes hay, pero pocos».

Por ahora, con esa entrega no le ha ido del todo mal. Acaba de ser uno de los precandidatos a los premios Goya como mejor actor revelación, por su papel en La manzana de oro, filme con el que Jaime Chávarri regresa a los platós después de casi 20 años sin dirigir. Y aunque finalmente no logró la nominación, tener tan cerca la posibilidad de acariciar el Goya es ya un paso de gigante para un actor que prácticamente, acaba de empezar. «Es mi primer largometraje y lo dirige una leyenda», recuerda el joven, que todavía no se cree que el realizador, del que ya era fan desde que vio El desencanto, le eligiera tras un casting en casa del director que fue más una charla que un examen, para encarnar a Álex en el filme inspirado en la novela Ávidas pretensiones, de Fernando Aramburu. El vigués forma parte de un reparto donde están Marta Nieto, Sergi López, Vicky Peña... actores a los que admira y con los que no se compara porque su currículo previo es «un papelito en una escena en El desconocido, con Luis Tosar, en la que me atropellaba y no tenía ni texto».

Desde entonces tiene agente, aunque sin él tampoco le fue mal del todo durante los tres años que se fue a vivir a Madrid. Hasta salió en un videoclip para el grupo New Order, que hizo encantado «porque yo cuando tenía 16 años pensaba que era Ian Curtis», comenta sobre el cantante de Joy Division tras cuya muerte sus compañeros fundaron la otra banda.

Ahora espera ilusionado el estreno de la tercera temporada de Rapa, donde tiene «un papel corto, pero mágico», en la serie que se estrenará el año que viene en Movistar y que se ha vuelto a grabar en Ferrol.

Como Abelo Valis sigue trabajando ese imaginario de marca (activa en su tienda online) que lo mismo aplica para diseñar camisetas con la imagen de Abel Caballero, un licor café, un vino o frases con guiños a la ciudad que también pasean en sudaderas y gorras, o para hacer brillar las luces led que hizo el año pasado en forma de foco con sensor. «Saco algo cuando me llama la atención. Este año iba a lanzar un vino rosado, pero al final lo paré porque no podía con todo». Ahora, Abelo confiesa que está entregado a la lectura y a ver todo el cine que puede. En Filmin es uno de los clientes más activos. Su resumen informan de que ha visto 684 películas.

De Phillip K. Dick a «Blade Runner» bajo el iceberg

Las referencias culturales de Valis no coinciden con las habituales de la gente de su edad. Su apellido, por ejemplo, es «una referencia y un homenaje» al escritor Phillip K. Dick, autor de novelas de ciencia ficción como Sueñan los androides con ovejas eléctricas, que es el libro en el que se inspira la película Blade Runner, «que me cambió la vida», asegura el artista, que da un giro inesperado: «Ahora me siento un poco Klaus Kinski, en el buen sentido», advierte explicando que está leyendo sus memorias y se empapa de todo lo que pasa por su vida, queriendo llegar siempre a descubrir «qué hay debajo de iceberg».