Varios concellos critican que hay incongruencias en el cobro de algunas tasas
16 abr 2024 . Actualizado a las 16:18 h.Ocupar el espacio que Portos tiene en los distintos concellos de la comarca tiene un precio y la cantidad no es nada despreciable, puesto que entre todos los ayuntamientos de la comarca donde tiene posesiones este ente de la Xunta se superan los 150.000 euros al año en el pago de tasas por la celebración de mercadillos, fiestas y distintas actividades deportivas, solidarias o culturales. Aunque todas las Administraciones locales son conscientes de que tienen que abonar este dinero, estas semanas se ha producido un pequeño contratiempo, y es que a muchos consistorios llegaron las facturas retrasadas de los dos últimos años juntos y en algunos recibos no cuadran las cuentas.
Así lo explica la alcaldesa de Muros, María Lago, que apunta que si ya les ha hecho un roto en los presupuestos la importante subida en el servicio de recogida de basura de Serra de Barbanza —pasan de abonar 400.000 a un millón de euros—, tampoco ayuda mucho recibir a destiempo este tipo de notificaciones con importes que rondan los 10.000 euros. Además, no entienden muchos de los conceptos que reclama ahora Portos, «porque houbo actividades grandes que non se facturaron, e hai outras cousas que unhas veces aparece cunha taxa de 60 euros, e outra actividade similar cóbrase más de 1.500». Por este motivo ya se han dirigido a este departamento autonómico para preguntar a qué corresponde cada una de las ocupaciones por las que tienen que pagar.
También en Outes acaban de recibir las notificaciones de Portos, aunque en su caso no son por importes muy elevados. Según explica el regidor, Manuel González, los recibos son de 1.086 y de 1.176 euros, «unha é pola última feira náutica que fixemos no 2022 e a outra é polo centro náutico que temos. Chegaron un pouco tarde, pero as cantidades son asumibles». Lo mismo ocurre en Carnota, donde el mandatario, Juan Manuel Saborido, calcula que cada año pagan en concepto de tasas a Portos unos 1.000 euros.
Ribeira, a la cabeza
Todo lo contrario ocurre en la capital barbanzana, donde la cantidad por ocupar espacio portuario ronda los 75.000 euros anuales, de los que 60.000 corresponden a la celebración del mercadillo de los sábados, y el resto a las fiestas y otras celebraciones que tienen lugar en la explanada de Ribeira. En este municipio la cifra todavía es mucho mayor si se le suman los festejos que se llevan a cabo en las parroquias de Palmeira, Aguiño o Corrubedo y donde suelen correr con los gastos las comisiones organizadoras.
En A Pobra también tienen que rascar bastante el bolsillo cada vez que celebran alguna actividad al borde del litoral incluidos los mercadillos semanales, fiestas o competiciones, puesto que en el 2022 las facturas llegaron a los 37.000 euros, mientras que el año pasado fueron de 26.000. En Rianxo han recibido estas semanas las últimas facturas de Portos y, según apunta Julián Bustelo, hay varios conceptos que no cuadran, por lo que lo atribuyen a que se están cobrando tasas correspondientes a ejercicios anteriores.
En el caso de Porto do Son, Luis Oujo explica que ellos siempre planifican con mucha antelación toda la programación que realizarán a lo largo del año y en la que precisarán ocupar parte de los terrenos portuarios, como O Rompetiño, las fiestas en honor de la Virgen del Carmen o la jornadas dedicadas a ensalzar el pulpo. El importe anual calcula que suele rondar los 8.000 euros y que al tenerlo todo calculado previamente no supone ningún problema a la hora de realizar la liquidación de estas tasas.
Falta de personal
Desde Portos de Galicia señalaron que el retraso en el cobro de estos recibos se debió a que tuvieron una baja en el departamento que tramita estas tasas a los distintos concellos, y que ahora se acaba de incorporar una persona que es la que está poniendo al día toda la documentación pendiente.
Además, desde el ente autonómico recordaron que aunque muchos concellos hayan estrenado equipo de gobierno, estos pagos hay que abonarlos cada año, y que los consistorios eran conscientes de que los debían de pagar, aunque ahora se haga con un cierto retraso.