Al Concello de Val do Dubra le faltan diez tabletas pero recuperó una cocina

Emma Araújo SANTIAGO / LA VOZ

VAL DO DUBRA

Imagen de archivo de una filloeira á pedra
Imagen de archivo de una filloeira á pedra Xoán A. Soler

La filloeira estaba en la casa de una edila del PP del anterior gobierno

11 abr 2024 . Actualizado a las 05:00 h.

Al Concello de Val do Dubra no le salen las cuentas de todo el material que debería estar en alguna de sus dependencias, ya que tras el ritual del cambio de corporación, en cuyo pleno de constitución siempre se incluye un arqueo de caja, el nuevo gobierno, un bipartito de PSOE y Anova, comprobó el inventario municipal y, al menos, echó en falta diez tabletas informáticas valoradas en 2.750 euros y una silla eléctrica motorizada cuyo valor se desconoce.

Ambas desapariciones constan en una denuncia presentada el 19 de enero ante la Guardia Civil por el regidor, el socialista Diego Luis Díaz. Estos hechos trascendieron durante el último pleno, cuando el primer teniente de alcalde, Antonio Negreira (Anova), solicitó la dimisión como concejales de todos los miembros del anterior gobierno del PP por estos hechos.

El Ayuntamiento también tenía traspapelada una cocina portátil adquirida para elaborar filloas á pedra, pero tras distintas pesquisas averiguaron que estos objetos se encontraban en un inmueble propiedad de una concejala del Partido Popular del anterior gobierno y que ahora está en la oposición. El material, consistente en seis hornillos de gas, seis piedras para elaborar filloas y tres soportes metálicos, fue recuperado el pasado 6 de febrero tras las pesquisas del ejecutivo. Un operario municipal se desplazó hasta el lugar de O Viso, en Rial, para recogerlo. La edila, sobre la que no consta denuncia alguna, no firmó la entrega de las filloeiras. En cuanto a las tabletas informáticas y la silla articulada, en la información facilitada por el alcalde a la Guardia Civil este detalla que fueron adquiridas por el Ayuntamiento el 26 de noviembre del 2020, en plena pandemia, y recibidas el 14 de diciembre de ese año. La compra de la silla fue autorizada el 8 de septiembre del 2021.

Tras buscar este material, los representantes municipales del nuevo gobierno, según declara el alcalde, se pusieron en contacto con miembros del anterior ejecutivo obteniendo como respuesta que los dispositivos informáticos se encontraban en la biblioteca municipal y que si las tabletas no estaban allí era porque alguien se las había llevado. Entre la documentación que aporta el Concello a la denuncia consta una fotografía de la biblioteca en la que se ven las tabletas. Diego Luis Díaz añade su declaración ante los agentes que el personal laboral y el responsable de la biblioteca municipal le notificaron que nunca tuvieron a su disposición las citadas tabletas. La empresa suministradora del material informático, con sede en Santiago, confirmó a Celsa Oreiro, edila de Anova del actual bipartito, que los diez dispositivos fueron entregados en fecha y plazo. Añade el regidor dubrés que al preguntar al personal del Concello por los citados dispositivos informáticos le manifestaron que, una vez recibidos, se llevaron al consistorio.

En relación a la silla, la información que recoge la denuncia es que el anterior gobierno dubrés le dijo al actual regidor que desconocían su paradero, pero le trasladaron que había sido entregada también dentro de los plazos establecidos. En la comparecencia ante la Guardia Civil, Díaz hace constar que al pedir información sobre dónde estaba la silla al departamento de Servizos Sociais y a la empresa dedicada al programa social para personas mayores le dijeron que nunca la habían visto.

Ante la pregunta de la Guardia Civil sobre si el alcalde tenía alguna información sobre la posible autoría de estos hurtos, este responde que la desconoce y señala que no puede precisar la fecha de su desaparición, si bien confirma que en el momento de presentar la denuncia este material no había aparecido. Y sigue ilocalizable, según reiteraron ayer tanto el regidor socialista como el primer teniente de alcalde (Anova). 

Diego Luis Díaz, regidor socialista de Val do Dubra, y Antonio Negreira, primer teniente de alcalde de Anova (derecha) durante la toma de posesión del actual bipartito
Diego Luis Díaz, regidor socialista de Val do Dubra, y Antonio Negreira, primer teniente de alcalde de Anova (derecha) durante la toma de posesión del actual bipartito Paco Rodríguez

Antonio Negreira: «Son incapaces de acreditar que non foron corruptos, deberían dimitir» 

La desaparición del material del Concello trascendió durante el último debate plenario cuando un representante del PP, único partido en la oposición, preguntó a Antonio Negreira por unas obras y sus medidas de seguridad. En ese momento, el primer teniente de alcalde les reprocha su actitud al afirmar que «están incapacitados para cuestionar estas cousas» y seguidamente añade: «Vostedes xestionaron o Concello como se fosen as súas dependencias particulares para levar material do Concello e organizalo desde as súas casas, e por este simple feito deberían dimitir». «Eu non sei se foron corruptos, o que sei e que son incapaces de acreditar que non o foron», añadió Negreira como respuesta durante el pleno. Ante esta denuncia, el ex alcalde del mandato anterior, el popular José Manuel Varela, respondió a Negreira señalando que «no turno de rogos e preguntas non se pode acusar aos concelleiros de corruptos. Se hai algunha causa, o que ten que facer é denuncialo. Non esconda a man».

Sobre este asunto también se pronunció el regidor, Diego Luis Díaz, confirmando en ese momento la denuncia ante la Guardia Civil sobre la desaparición de las diez tabletas informáticas. Añadió que había informando sobre estos hechos «porque é a miña obriga, non por gusto».