De la talla 4 a la 62, todos contra la bulimia y anorexia

Patricia Calveiro Iglesias
P. Calveiro SANTIAGO / LA VOZ

SANTIAGO

Músicos, cómicos, comunicadores y artistas varios se unieron a la Gala da Diversidade de Abagal en Santiago

20 oct 2014 . Actualizado a las 05:00 h.

Desde la talla 4 a la 62. Todos pasaron por la alfombra roja de la octava Gala da Diversidade. Unos más altos. Otros más bajos. Con muchas o pocas curvas. Una verdadera fiesta de culto al cuerpo en su amplio rango de esplendores organizada en Santiago por la Asociación de Bulimia e Anorexia de Galicia, dentro de su gesta social para combatir los estereotipos que tanto influyen en los trastornos de la conducta alimentaria.

Un nutrido grupo de artistas se ofrecieron a actuar en la gala. Desde los ya habituales, como Mela Casal y Xabier Picallo, que se encargaron de recibir al público y animar la velada desde el patio de butacas, pasando por músicos y humoristas, hasta magos y bailarines.

La gala contó con una introducción a cargo de la psiquiatra de la Unidad de Trastornos Alimenticios María José Gastañaduy. El grupo dezano Barrio Rojo y Bieito Solo interpretaron dos temas cada uno. El ritmo recorrió la Sala Mozart del Auditorio con los bailes de Balancé Danza. Pedro Brandariz arrancó las sonrisas del público con un divertido y pertinente monólogo sobre la moda del running: «Non entendo isto de correr sen sentido, e menos se ao final non hai churrasco», resumía sin complejos enfundado en un look de deportista pseudo-ochentero imposible.

El Mago Adry y el espectáculo cómico de Cada Día Peor tomaron el relevo para disfrute tanto de pequeños como de mayores. Y, de colofón, culminó la gala con el tradicional Desfile da Diversidade, en el que participan improvisados modelos que representan la realidad de la calle. Contó en esta ocasión con unos veinticinco adultos (entre los que estaba el piloto de rallies Luis Penido) y otros tantos niños.

Socios, amigos e hijos se prestaron a lucir ayer la ropa que cada año presta la marca Emilio Iglesias sobre una desenfadada pasarela de moda que siembra para el futuro, ya que contó con la implicación de niños de 4 años en adelante. Sobre la pasarela, entre bambalinas y también como espectadores, las futuras generaciones recibieron un mensaje clave que pocas veces llega a través de los medios y de la publicidad y es que el físico no lo es todo, o no debería serlo.

También pusieron su granito de arena en la lucha contra la bulimia y anorexia las cerca de 150 personas que asistieron a la cita impulsada desde sus inicios por Mela Casal y Gloria Ferreiro, así como otras muchas que contribuyeron desde la fila cero con la gala destinada a recaudar fondos para Abagal. Su fundadora, María Flora Cajide, se mostró satisfecha con la participación, «teniendo en cuenta que hoy jugaban el Dépor y el Compos y había otros eventos importantes en Santiago, como el maratón contra el cáncer de mama del Multiusos». Asegura que la implicación va cada año a más pero, con todo, «aún nos queda mucho por hacer», señaló.

Una enfermedad muy vigente

«Echamos de menos ver en las tiendas tallas más grandes a la 42», indicó Cajide. «Se empieza a ver alguna famosa que presume de sus curvas y a través de la publicidad también está habiendo alguna campaña que rompe los estereotipos, son modelos muy imitados, por lo que esperamos que haya un cambio de tendencia y se deje de lado la extrema delgadez», añadió.

La presidenta de Abagal asegura, por otra parte, que la anorexia y la bulimia siguen tan vigentes como siempre, con repuntes en épocas puntuales -como antes del verano-. «Es una enfermedad que no va a desaparecer por sí misma, porque se trata de un tema cultural, y lo hará a medida que la sociedad vaya olvidando ese culto exacerbado a la imagen», concluyó.

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