La CIG reclama el compromiso de la Xunta para salvar la Universidade

Santiago / la voz

SANTIAGO

30 sep 2014 . Actualizado a las 05:00 h.

La CIG ha valorado negativamente el plan de equilibrio presentado por la Universidade de Santiago y asegura que solo el compromiso financiero de la Xunta puede salvar a la institución académica. El sindicato nacionalista lamenta que no haya intención de ayudar a la USC porque molesta políticamente, y ha arremetido contra el documento económico presentado la semana pasada ante el Consello Económico porque recae casi exclusivamente en el personal.

Alba Nogueira, profesora universitaria, asegura que los recortes han sido ya durísimos y que el dinero que se recorta ya no lo recibe la universidad para pagar la deuda, sino que simplemente la Administración autonómica no lo ingresa. Desde la CIG exigen a la USC que explique qué carreras tendrán que desaparecer por los recortes y las medidas de la Xunta, ya que el personal no se repone, lo que provoca que la institución tenga en torno a un quinto menos de personal.

Más historia, más cara

Los representantes de la Confederación Intersindical Galega recuerdan que el problema de financiación de la USC -las otras dos universidades gallegas no tienen actualmente ni déficit ni deuda- se debe a que la institución compostelana tiene más historia y unas instalaciones más antiguas que por lo tanto tiene que conservar y mantener. Critican además que la parte fija que la Xunta destina a la USC no llega ni para pagar las nóminas, y estiman en 50 millones el recorte que sufrió la Universidade en los últimos años.

Plantilla envejecida

Otro de los problemas que afectan a la USC es el envejecimiento de su plantilla, ya que más de la mitad del personal supera los 50 años, y solo el 15 % tienen menos de 40, una característica que tiene su incidencia en aspectos como la producción científica, ya que la proximidad a la jubilación no incrementa la tasa de producción, sostienen en la CIG. El sindicato lamenta que se hagan más esfuerzos en salvar concesionarios que una universidad pública.