El Sergas ha invertido 2,5 millones en equipos de neurorradiología intervencionista para los hospitales de Lugo y Ourense
28 oct 2023 . Actualizado a las 17:39 h.Tras años de demandas, el HULA, el hospital de Lugo, tendrá una unidad de ictus. Así lo recordó esta semana el conselleiro de Sanidade, Julio García Comesaña, que avanzó que tanto la ciudad amurallada como Ourense dispondrán de la tecnología que permitirá tratar unas patologías que hasta la fecha derivaban a otros centros. En el caso de Lugo, los pacientes afectados se trasladaban a A Coruña.
Un equipo de neurorradiología intervencionista será el que permitirá operar los ictus desde principios del próximo año en Lugo. Adquirir los dos equipos (uno para el HULA y otro para el hospital de Ourense) ha supuesto un desembolso de 2,5 millones de euros a la Xunta, que ya ha estado preparando también las salas en las que se instalarán. En el caso del centro lucense, la adaptación de las salas de neurorradiología han supuesto otros dos millones de euros más.
Disponer de una sala de neurorrardiología intervencionista es una vieja demanda de la sociedad lucense. Muchas han sido las peticiones que los colectivos vecinales han trasladado a la Xunta para disponer de este servicio, recordando que, según las estadísticas, una de cada cuatro personas sufrirá un ictus a lo largo de su vida, y en el 2022 la patología le costó la vida a 24.000 personas en España, según datos de la Sociedad Española de Neurología (SEN).
Desde la plataforma vecinal de Lugo, muy combativa con esta cuestión, demandan desde hace tiempo varias cuestiones para la llamada unidad de ictus, más allá de la aparatología que se incorporará ahora.Piden desde hace tiempo varias cuestiones para la llamada unidad de ictus: un neurólogo de guardia 24 horas día, con presencia física en el HULA. Un neurroradiólogo de guardia 24 horas día, con presencia física para diagnostico y tratamientos. Un equipo de enfermería (con un ratio de 1 enfermera/o por cada 4 camas de la unidad las 24 horas del día. Una unidad de camas especificas para ictus. Una dotación de monitorización neurológica. Un servicio de rehabilitación global especifico, con ayuda a la adaptación en el hogar, servicios de apoyo a la movilidad, sesiones de rehabilitación, aportación de servicio de fisioterapia al ictus, ayuda a pacientes que precisan de un neuropsicólogo, colaboración de logopeda, plan de rehabilitación cognitiva, ayuda y aportación social en la búsqueda de residencias o centros de día, ayuda social y económica a los pacientes que precisen para su cuidado de un familiar que puede verse obligado a abandonar su trabajo.