«Tivemos que axudar a baixar a un veciño que está en silla de rodas»

La Voz

LUGO

25 jul 2014 . Actualizado a las 07:02 h.

Los vecinos del número 17 de la calle Irmáns Carro vivieron una mañana especialmente ajetreada debido al fuego que se desató cerca del mediodía en el 4ºD. «Cando vimos o fume entrei, vin o colchón ardendo e asegureime de que non quedase ningún neno dentro porque ás veces hai un rabaño de pequenos nel», explicó Marisa González, que reside enfrente del piso afectado desde hace más de 25 años. «Tivemos que axudar a baixar a un veciño do terceiro que está en silla de rodas», señaló Luis Campo, vecino de otro de los cuartos. Fueron ellos quienes dieron la voz de alarma y avisaron al 112 y a los bomberos. Pagos de la hipoteca

Distintas fuentes indicaron que el piso en el que residen las dos familias gitanas afectadas no es de alquiler, sino que están pagando una hipoteca por él. «Pero aún queda mucho», destacó la madre de Beatriz y María Perpetua Montoya. «Llevamos toda la vida en el paro, pero como no nos ayudan andamos pidiendo por las calles», agregó. Al parecer, una de las hermanas lleva en torno a una década viviendo con su familia en el inmueble incendiado ayer, mientras que la otra se mudó hace algunos meses con dos de sus hijos.

«En las familias gitanas los hijos se casan, y como no hay trabajo ni casa se quedan a vivir porque no vamos a dejar tirados a las hijas, a los yernos, a los nietos... Por eso semos tantos», indicó otro gitano que se desplazó al lugar poco después de conocer la noticia del suceso, que corrió como la pólvora entre la población calé de la ciudad amurallada.