Más de la mitad del posible jurado dice no poder ser imparcial en el caso contra Trump

Mercedes Gallego NUEVA YORK / COLPISA

INTERNACIONAL

Donald Trump, el martes saliendo del tribunal de Manhattan.
Donald Trump, el martes saliendo del tribunal de Manhattan. Mary Altaffer | REUTERS

El expresidente solo consiguió un 14 % de los votos de Manhattan en el 2020

16 abr 2024 . Actualizado a las 22:47 h.

El segundo día de juicio contra Trump empezó con una verdad implacable. No será fácil encontrar en Manhattan a 18 personas que no tengan una idea preconcebida sobre Donald Trump, con las que poder formar un jurado de 12 miembros y seis sustitutos. La primera tanda de seleccionados se componía de 96 personas (en total, se convocarán 500), a las que el lunes tomaron juramento pasadas las dos de la tarde, hora local. Pero más de la mitad de las mismas fueron desestimadas de inmediato, al reconocer que no podrían ser imparciales.

Ese es el gran reto de enjuiciar a una celebridad como Trump, que ha pasado la vida en los tabloides y los últimos ocho años en todas las televisiones. En la isla de los rascacielos, el polémico expresidente de Estados Unidos perdió las elecciones frente a Joe Biden por la abrumadora cifra de 84 % a 14 %, lo que hace difícil encontrar un jurado que simpatice con su causa, pero no imposible. Antes, los abogados habían conseguido una nueva demora al perder la mañana «inundando» al juez Juan Merchán con mociones que, según el magistrado, eran «cercanas a frívolas, si no frívolas». El propio Trump daba cabezadas durante el debate, que iba desde concederle el día libre para que acuda la semana que viene a la audiencia del Supremo sobre su inmunidad o en mayo a la graduación de su hijo Barron, por citar algunas de las significativas. El magistrado no capituló. «Argumentar ante el Supremo de EE.UU. es una cosa muy gorda y puedo apreciar que su cliente quiera estar allí, pero el Tribunal Supremo de Nueva York también es muy importante», zanjó. Más condescendiente fue con uno de los ciudadanos reclutados para el jurado, al que excusó de su papel para que pueda asistir a la boda de su hijo en Seattle, que se celebrará en junio. «Creo que para entonces habremos terminado, pero no puedo prometerlo», le explicó el juez antes de dejarlo partir. «Si estás con nosotros, es hasta el final», aseveró.

Dos cargos, en la cuerda floja

El Tribunal Supremo se mostraba anoche escéptico sobre que el asalto al Capitolio en el 2021 se pueda considerar una obstrucción a la certificación de la victoria de Joe Biden. Las condenas de 150 participantes en el levantamiento se basan en esa interpretación de la ley. Si se desestima, dos de los cargos federales contra Trump en el caso sobre su conspiración para revertir las elecciones del 2020 podrían desaparecer.

Liz Truss afirma que el mundo era más seguro con el expresidente republicano

La ex primera ministra británica conservadora Liz Truss, recordada por su polémico plan fiscal que hundió los mercados, ha dicho que confía en que el expresidente de Estados Unidos, Donald Trump, vuelva a ganar las próximas elecciones en el país, ya que bajo su mandato «el mundo era más seguro».

En una entrevista en la BBC, la exjefa del Ejecutivo de Londres, que solo duró 49 días en Downing Street, opina que el mundo está ahora «al borde de un conflicto muy muy grave», que precisa de «una América más fuerte que nunca».

La antigua líder conservadora ha sacado un libro, Ten Years To Save The West («Diez años para salvar Occidente»), en el que no escatima en elogios hacia Trump y afirma que confía en que él venza los próximos comicios del país norteamericano, que se celebrarán en noviembre.

«Creo que necesitamos una América fuerte. Es más importante que nunca. Estamos al borde de un conflicto muy grave», explicó Truss para justificar su postura. Agregó que «bajo el mandato de Donald Trump, cuando era presidente de Estados Unidos, el mundo era un lugar más seguro».

Truss, que sucedió en el poder al exlíder tory Boris Johnson, se vio obligada a dimitir tras presentar un controvertido plan fiscal con una masiva rebaja de impuestos que puso patas arriba los mercados y hundió la libra esterlina.

Joe Biden y su esposa, Jill, ganaron cerca de 620.000 dólares en el 2023

El presidente Joe Biden y la primera dama, Jill Biden, ganaron 619.976 dólares (unos 583.000 euros) en el 2023, según su declaración de impuestos conjunta publicada el lunes por la Casa Blanca en un esfuerzo por continuar con la tradición de los presidentes de revelar sus ganancias anuales. Biden y su esposa pagaron 146.629 dólares en impuestos federales y 30.908 en impuestos estatales en Delaware. La primera dama pagó además 3.549 dólares en impuestos sobre la renta en Virginia. Los ingresos de la pareja presidencial en el 2023 aumentaron casi 40.000 dólares con respecto a lo reportado en el 2022, año en que ganaron 579.514. La Casa Blanca señaló en su comunicado que Biden cree que «todos los ocupantes del Despacho Oval deben ser abiertos y honestos con el pueblo estadounidense», y subrayó que se debe continuar con la tradición de publicar anualmente las declaraciones de impuestos presidenciales sin interrupción. Biden retomó esa tradición después de que el expresidente republicano Donald Trump se negara a publicarlos en su mandato.