La familia del agente cubano de la CIA no se cree que fuera un espía

Redacción / La Voz

INTERNACIONAL

Rolando Sarraff Trujillo formó parte del canje con Cuba del miércoles

20 dic 2014 . Actualizado a las 05:00 h.

Los padres de Rolando Sarraff Trujillo, identificado como el agente cubano que trabajaba para la CIA y que formó parte del canje con Cuba del miércoles, «no sabían que era un espía», pero fueron informados por funcionarios de La Habana de su liberación y de su destino era Estados Unidos, según confirmó el director ejecutivo del Observatorio Cubano de Derechos Humanos, Alejandro González Raga, a Europa Press.

Sus padres, Rolando Sarraff y Odesa Trujillo, recibieron una llamada en su casa en La Habana en la que le informaban de su excarcelación de su hijo y de que viajaba hacia Estados Unidos. Desde entonces no han tenido más noticias de él.

Dos hermanas en España

Sus dos hermanas, Vilma y Katia, residen en España, la primera en Cuenca y la segunda en Mallorca, desde hace más de diez años.

Vilma Sarraff no se cree que su hermano sea el espía clave que Obama mencionó en su discurso, y que son solo especulaciones de los medios estadounidenses. Vilma, que es directora del Instituto de la Sostenibilidad Turística (ISTur), lleva años denunciando la detención injusta de su hermano. En su blog rolandosarraff ha reproducido cartas y pinturas enviadas a sus padres por Rolando desde la cárcel.

Sarraff llevaba 20 años en la prisión de Guanajay, 16 de ellos aislado en una celda. Hace siete meses fue trasladado a Villa Marista, el cuartel de la Policía Política en La Habana», indicó González Raga, que deduce que este traslado se debía a las negociaciones abiertas. De acuerdo con su familia, estudió Periodismo en la Universidad de La Habana y tenía el rango de teniente.

Según contó a The New York Times Chris Simmons, que fue el jefe de contrainteligencia cubana en la Agencia de Inteligencia de la Defensa de 1996 al 2004, antes de su arresto en noviembre de 1995 Sarraff trabajaba en la sección de criptología de la Dirección de Inteligencia de Cuba y su cometido era hacer llegar los códigos con los que se comunicaban los espías cubanos en Estados Unidos con la isla. El Gobierno cubano supo de sus planes para desertar y lo detuvo. En opinión de Simmons, Sarraff no fue ejecutado porque sus padres ocupaban cargos en el régimen.

Sarraff trabajaba junto con un amigo de la niñez, José Cohen, que logró escapar de Cuba en una barca hinchable y fue condenado a muerte en ausencia.