Confirman el archivo de la última causa de la Pokémon relativa al Concello de A Coruña

Xosé Vázquez Gago
Xosé Gago SANTIAGO / LA VOZ

GALICIA

La jueza Pilar de Lara, que fue la instructora de la operación Pokémon
La jueza Pilar de Lara, que fue la instructora de la operación Pokémon Eliseo Trigo

El caso llevaba 10 años abierto y a varios de los implicados no se les notificó el cierre de las actuaciones

05 jun 2023 . Actualizado a las 05:00 h.

En las Navidades del 2013, la jueza Pilar de Lara llamó a declarar como imputadas a doce personas del Ayuntamiento de A Coruña en el marco de la operación Pokémon. Eran funcionarios municipales, desde administrativos a jefes de servicio, cargos de confianza y dos ediles: José Nogueira (PSOE) y Julio Flores (PP).

Con la causa bajo secreto de sumario, pasaron el fin de año y Reyes sin saber por qué se les investigaba. Pero la gran expectación levantada por la operación, que pronto se amplió a más de 60 personas solo en A Coruña, y de la que se conocían datos a diario pese al supuesto secreto, les colocó en el disparadero.

Como otros cargos públicos, Nogueira y Flores tuvieron que renunciar a su carrera política y a ser candidatos en las elecciones municipales del 2015. Las consecuencias personales para ellos y para el resto de imputados no fueron menores. Hubo escraches y publicaciones injuriosas amparadas por grupos rivales contra el edil popular. A muchos los insultaron por la calle.

Hoy, casi una década después, se sabe que los trabajadores municipales y los dos ediles son inocentes. Nogueira fue exonerado ya en enero. Flores también lo está, pero el exconcejal y otros investigados todavía no tienen un auto que se lo notifique.

El archivo de la última causa pendiente, referida a supuestas irregularidades en la contratación del mantenimiento biológico del acuario de A Coruña, se daba por sentado a primeros de año. Uno de los letrados que conocen el caso afirma que sufría de los mismos problemas que las demás causas archivadas de la Pokémon. Son «instrucciones prospectivas y sin fundamento» en las que nunca llegaron a concretarse indicios claros de delito.

El auto no llegaba

Pero el auto no llegaba. Uno de los abogados afirma que el problema es que, cuando se trasladó el asunto desde Lugo hasta A Coruña, no se requirió a los afectados para que confirmasen su representación o designasen una nueva. Otro sitúa el problema en la falta de medios de la Justicia y la cadena de huelgas que sufre.

Los letrados de varios investigados, entre los que figuraba Flores, acabaron por recurrir a la Oficina de Atención ao Cidadán e Asistencia á Vítima de los juzgados de Lugo, que confirmó que «no consta registrado ningún procedimiento» a nombre del exedil ni de otros investigados en la misma causa, pero sí está registrada una «pieza de nulidad de actuaciones», lo que confirma el fin de las pesquisas.

Algunos de los investigados por Pilar de Lara han recuperado su carrera política. Es el caso del exalcalde de Ourense, Francisco Rodríguez, o de José Ramón Gómez Besteiro, antiguo secretario general del PSdeG, hoy delegado del Gobierno. Otros decidieron pasar página, como el socialista José Clemente López Orozco, exalcalde de Lugo.

Los implicados en A Coruña tendrán ahora ambas posibilidades. Pero más allá del alivio, el final está muy lejos de suponer una reparación. Pese a las graves consecuencias de estar investigado casi diez años, a algunos «nunca más se les volvió a notificar nada» desde el 2014 y «quedaron englobados en el archivo», dice uno de los letrados. El abogado recuerda que un investigado «no tiene que demostrar nada», es la culpabilidad la que debe demostrarse, pero el daño de haber estado diez años imputado «no te lo quita nadie».