Los primeros rumores de aspirantes al relevo de Sánchez si hay dimisión

Gonzalo Bareño Canosa
Gonzalo Bareño MADRID / LA VOZ

ESPAÑA

Eduardo Parra | EUROPAPRESS

María Jesús Montero, Pilar Alegría o José Luis Rodríguez Zapatero suenan como posibles sustitutos

27 abr 2024 . Actualizado a las 11:45 h.

Nadie en el partido quiere hablar en público de otra cosa que no sea la petición a Pedro Sánchez de que tras su período de cinco días de reflexión tome la decisión de permanecer al frente del Gobierno y del PSOE. Pero han aparecido ya los primeros rumores para un supuesto relevo del presidente del Ejecutivo. La situación y los nombres que suenan dependen en primer lugar de la decisión que tome Sánchez, porque no es lo mismo que dimita de su cargo que se plantee disolver las Cortes 

La decisión de dimitir implicaría que se abra un proceso de consultas del rey para explorar qué candidato, del PSOE o de cualquier otro partido, cuenta con el mayor número de apoyos para ser investido presidente.

La vicepresidenta primera y vicesecretaria general del PSOE, María Jesús Montero, es quien de manera natural encabezaría el Gobierno de forma transitoria en caso de una dimisión del presidente del Gobierno. Es también la principal candidata a sustituir a Sánchez como líder del partido.

La hipótesis de Zapatero

El otro nombre que se menciona en las quinielas es el de la ministra de Educación y portavoz del Gobierno, Pilar Alegría, que ha ido ganan do en ascendencia dentro del partido desde que Sánchez la incorporó a su Gobierno. Sería la opción para agotar la legislatura.

Hay también otras especulaciones, como la de que el expresidente del Gobierno José Luis Rodríguez Zapatero, que se está mostrando muy activo desde que Sánchez anunciara que se tomaba un período de reflexión, pueda postularse para ser designado presidente del Gobierno. No se necesita ser diputado y contaría con el apoyo de Junts.

Pero la situación sería distinta si la resolución que tome Pedro Sánchez es la de convocar unas elecciones en el mismo momento en el que la ley lo permita. Esa fecha es la del 29 de mayo, en la que el año pasado se disolvieron las Cortes para convocar elecciones. Se respetaría así el plazo de un año que la norma establece para llamar a las urnas.

Debe pasar un año

El artículo 115 de la Constitución establece en su tercer apartado que «no procederá nueva disolución antes de que transcurra un año desde la anterior, salvo lo dispuesto en el artículo 99, apartado 5». Ese apartado indica que «si transcurrido el plazo de dos meses a partir de la primera votación de investidura, ningún candidato hubiere obtenido la confianza del Congreso, el rey disolverá ambas cámaras y convocará nuevas elecciones con el refrendo del presidente del Congreso».

En ese caso, bien el propio Pedro Sánchez o la vicepresidenta primera, María Jesús Montero, permanecerían interinamente al frente del Gobierno hasta que los ciudadanos voten y se constituya el nuevo Gobierno. En caso de que se fuera a unas nuevas elecciones generales, la nómina de posibles aspirantes a la presidencia del Gobierno podría aumentar. Uno de los posibles nombres para afrontar esa nueva etapa del PSOE es el del presidente de Castilla-La Mancha, Emiliano García-Page, que se ha destacado por ser el que con más claridad ha criticado los acuerdos de Pedro Sánchez con los partidos independentistas para formar una mayoría en el Congreso. Esa opción es sin embargo improbable porque supondría dar un giro radical a las políticas del Gobierno.