Carrefour dejará de vender Pepsi, Lay's y Doritos en sus tiendas en España por la subida de sus precios

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ECONOMÍA

Carteles explicativos sobre el boicot a Pepsico colocados en supermercados Carreofur en Francia
Carteles explicativos sobre el boicot a Pepsico colocados en supermercados Carreofur en Francia SARAH MEYSSONNIER | REUTERS

La cadena de supermercados hará boicot a los productos de Pepsico en los cuatro países en los que opera por un encarecimiento «incaceptable»

05 ene 2024 . Actualizado a las 18:25 h.

Carrefour está dejando de vender los productos de Pepsico en España, Francia, Italia y Bélgica debido a un «inaceptable incremento de precios». Bajo la marca estadounidense están incluidas otras tan conocidas como los refrescos Pepsi y 7Up y las patatas Lay's, Doritos y Cheetos. La cadena de supermercados ha anunciado que una vez se terminen las existencias en sus tiendas, no las repondrá.

La empresa gala ha comenzado a colocar carteles explicativos en los lineales de sus establecimientos. «Ya no vendemos esta marca debido a los aumentos inaceptables de los precios», rezan los mismos. Según la cadena de radio francesa RTL, Pepsico exige al supermercado subidas del 7 % en las negociaciones que se están llevando a cabo entre las partes. La compañía norteamericana ya advirtió en octubre de que tenía previstos incrementos «modestos» de los precios este año. Paralelamente, revisó al alza tres veces sus previsiones de ingresos del 2023 gracias precisamente a que sus productos eran más caros y seguían vendiéndose al mismo ritmo. Ahora, Carrefour ha decidido plantarse —primero en Francia y después en el resto de países— y romper relaciones comerciales con Pepsico.

Carteles explicativos sobre el boicot a Pepsico colocados en supermercados Carreofur en Francia
Carteles explicativos sobre el boicot a Pepsico colocados en supermercados Carreofur en Francia STEPHANIE LECOCQ | REUTERS

La medida afecta a más de 9.000 tiendas de la cadena de supermercados en los cuatro países. No es la primera vez que Carrefour toma una medida como esta. En septiembre del año pasado incluyó advertencias en productos de marcas como Lindt o Lipton para informar de que las empresas fabricantes habrían reducido la cantidad consumible de los mismos al tiempo que elevaban sus importes de venta al público.

Este fenómeno tiene nombre: reduflación. Consiste en reducir el producto de los envases y mantener el precio o incluso subirlo algunos céntimos. La medida, casi imperceptible para el consumidor, se traduce en ganancias para las marcas de alimentación que la implantan. Y es especialmente eficaz en los snack como las patatas fritas de bolsa y otros aperitivos similares. ¿Quién no ha notado que el envase se encuentra con menos peso —y más aire— del habitual?

La Organización de Consumidores y Usuarios (OCU) ya denunció el año pasado ante la Comisión Nacional de los Mercados y la Competencia (CNMC) a varias empresas españolas por aplicar reduflación. Según un estudio de la propia entidad, al menos un 7 % de los productos de la cesta de la compra se ha visto afectado por esta técnica.