El mercado laboral gallego se la juega: el desafío de captar y retener talento

María Meizoso REDACCIÓN / LA VOZ

ECONOMÍA

La Voz acogió un foro que analizó la oferta y la demanda de profesionales

14 feb 2023 . Actualizado a las 15:57 h.

Responder de forma ágil y eficaz a los cambios constantes que se producen en el mercado laboral. Ese es uno de los retos que incluye el gran desafío al que tratan de dar respuesta la Administración autonómica y el tejido empresarial para ajustar y conectar la oferta y la demanda de empleo. Galicia reivindica la fórmula de la colaboración público-privada y así lo demuestran las diferentes iniciativas implementadas. Entre ellas, el impulso de un nuevo Servizo Público de Emprego de Galicia (SPEG).

Los últimos datos de la encuesta activa de empleo (EPA) indican que, en la actualidad, en Galicia hay 132.000 personas desocupadas. Sin embargo, «se da la situación de que, en la mayor parte de los sectores, existen una clara necesidad de personas que trabajen. Y ahí es donde está el reto de los gobiernos, de las empresas y de toda la sociedad». Así lo expulso María Jesús Lorenzana, conselleira de Promoción do Emprego e Igualdade en un encuentro celebrado ayer en la redacción de La Voz al que también se sumaron Tino Fernández, presidente de Altia; Carlota López Pardo, adjunta a la presidencia de Aresa; y Enrique Orge, director general en Europa del Grupo Calvo.

En un contexto marcado por el descenso del paro y el crecimiento en el número de afiliaciones, Orge subrayó que el «desafío es para todos». En su caso, reconoció que «estamos calentando motores para lo que esperamos sea una buena Semana Santa y un buen verano». La factoría, ubicada en Carballo, ha activado el turno del fin de semana y eso significa «contratar». Pero «hay departamentos como el de Compras o Logística en los que estamos buscando personal y no es sencillo. Tampoco entre los mecánicos o electromecánica, que tienen que gestionar cada vez máquinas más complejas». Por ello, abogó por estrechar lazos entre entidades públicas y privadas que maximicen las opciones para encontrar a los mejores perfiles.

El nivel de cualificación que se requiere es cada vez mayor. Se evidencia en todos los sectores, también en los puramente tecnológicos como son las TIC. En ese sentido, el presidente de Altia subrayó que «estamos en un momento bueno, de crecimiento de empleo y de número de empresas». Un escenario marcado por las oportunidades y por las carencias, porque «hay más necesidades de las que se pueden cubrir». Y, en esto, la pandemia es una de las responsables del cambio de paradigma. «El mercado laboral local se ha roto», para dar paso a uno «multinacional». Así, incidió Fernández, «hay personas que nunca han viajado a Holanda o Francia que están trabajando en Galicia con salarios de esos mercados». El impulso de la digitalización ha supuesto un nuevo empuje, pero también que la demanda de dichos perfiles se haya tensionado.

Oportunidades

El mercado laboral gallego se enfrenta a otro obstáculo: la despoblación. En ello insistió López Pardo al asegurar que «hay problemas para conseguir personal en las explotaciones agroganaderas cuando los perfiles técnicos en ganadería o agricultura tienen mucha demanda y el rural de Galicia, muchas oportunidades».

El Servizo Público de Emprego de Galicia (SPEG) se encuentra inmerso en una renovación integral de sus funciones. Se ha incorporado la inteligencia artificial, a nuevos orientadores laborales y cuenta con herramientas digitales para que la reconfiguración sea completa. En esa nueva ecuación, «las empresas están en el centro», citó Lorenzana, porque «son las que nos tienen que comunicar cuáles son sus necesidades formativas y de trabajadores». El departamento autonómico, que se encarga de la financiación, formó en el 2022 a más de 12.000 personas.

Así, en el marco de esta renovación integral aparecen iniciativas concretas como el Programa Retorna Cualifica Emprego, destinado a personas de origen gallego «que pueden ver en Galicia una oportunidad laboral», pero, sobre todo, «un lugar donde encontrar empleo estable».

Una amplia estrategia, en la que la Xunta trabaja codo con codo con entidades como la Asociación Gallega de la Empresa Familiar —representada por Altia, Grupo Calvo y Aresa —y que, a juicio de Orge, «es precisamente lo que necesitamos, ir más allá de la fase educativa» para conectar con el corazón de las empresas. Fernández abundó en el «acierto» del programa que vienen desarrollando conjuntamente. Y, aseguró que, ante la «tercera revolución en la educación», las formaciones serán más cortas y más enfocadas a la actividad de las empresas. A ese respecto López, añadió que «sin la colaboración del sector público y privado es muy difícil atraer talento a Galicia». La clave, resume, es «estar alineados para dinamizar la creación de empleo y la competitividad».

Empleados más satisfechos y empresas que ganan en productividad

El concepto de bienestar laboral engarza directamente con la radiografía descrita por los cuatro participantes en el encuentro. Una foto fija que refleja el momento que atraviesa el mercado laboral, que atiende las demandas de los empresarios, pero también de los trabajadores. Un escenario, el actual, marcado, tal y como suscribió Lorenzana, por la necesidad de «fidelizar el talento», porque «cuanto más seas capaz de atraerlo, más competitivo vas a ser». Un desafío que escapa del aspecto puramente salarial. «Hay muchas más cuestiones que inciden para que un trabajador escoja una empresa y para que, una vez está allí, quiera quedarse». La conselleira aludió a la «movilidad, a las posibilidades que ofrece el territorio», a la conciliación, permisos y otras medidas «como la flexibilidad en los horarios o el teletrabajo» y, por último, mencionó la igualdad y la diversidad a la hora de conformar los equipos.

En la misma línea se manifestó el director general en Europa del Grupo Calvo porque, para Orge, «el empleado de hoy en día valora el sueldo, pero mucho más la conciliación con la vida familiar». La compañía que dirige favorece el teletrabajo y dispone de horarios de entrada y salida flexible. A ello sumó la importancia de que «la empresa te ofrezca un lugar de desarrollo con una carrera profesional, pero también alternativas de ocio». En su caso, clases de yoga y pádel para todos sus empleados.

Ese conjunto de factores conectará al trabajador con su empresa, y viceversa. «Es importante captarlos, pero la retención, si cabe, lo es aún más», matizó López. La adjunta a la presidencia de Aresa incidió en que «la empresa familiar siempre ha tenido el foco ahí puesto». Un factor que se evidencia en que «la tasa de retención ha sido mayor que en otras empresa» y que tiene su origen en el compromiso con el territorio.

«Crecer haciendo crecer»

No solo el mercado laboral gallego ha mutado con el paso de los años. También lo ha hecho la relación entre las empresas y sus trabajadores. «Es más que evidente que esto no se limita a pagar, a intercambiar trabajo por dinero, es mucho más amplio», afirmó Fernández. Su obsesión, reconoció el presidente de Altia, «pasa por crecer haciendo crecer». Desarrollo y prosperidad para su compañía, para sus empleados, para sus clientes y también para su entorno.