El Pontevedra confirma su apuesta por un fútbol más combinativo

Aleixandre Méndez
Álex Méndez PONTEVEDRA / LA VOZ

DEPORTES

Jacobo actuó de inicio en su regreso a Pasarón una temporada después de su salida.
Jacobo actuó de inicio en su regreso a Pasarón una temporada después de su salida. capotillo< / span>

El equipo granate demostró su intención de tratar mejor el balón ante el Valladolid

29 jul 2014 . Actualizado a las 17:50 h.

El nuevo Pontevedra dejó los primeros detalles para el análisis en el partido que le enfrentó el pasado sábado ante el Valladolid. Con solo cinco sesiones de trabajo en sus piernas, el equipo se esforzó por agradar a la parroquia de Pasarón y al técnico, y pese a la derrota por 0-3 frente a un rival recién descendido de Primera, logró dejar un buen sabor de boca y motivos para la esperanza. Una esperanza que se centra no solo en que sea un bloque competitivo en cuanto a números, sino también en lo que se refiere a practicar un fútbol vistoso.

De salida, Manu Fernández apostó por un bloque que, a expensas de cómo evolucione el grupo a lo largo de la pretemporada, bien podría ser el once de gala habitual en liga. Con toda la plantilla disponible, salvo Pablo Carnero por unas molestias en la zona abdominal, el técnico alineó de inicio a cinco jugadores que continúan de la pasada campaña y a seis de los fichajes. Aunque, curiosamente, casi todos estos refuerzos actúan en labores ofensivas, precisamente la tarea que el entrenador reconoce que el equipo necesita mejorar respecto al curso anterior.

Así, en portería jugó de inicio Edu, que tendrá una dura competencia en Lloves, mientras que la línea defensiva la conformaron Adrián y David Feito en los laterales con Pablo y Campillo en el centro de la zaga. Este último fue la única novedad en una retaguardia que, a pesar de algunos errores puntuales, dejó muestras de que intentará mantener la solvencia de la pasada temporada.

La revolución, en cambio, llegó a partir del medio campo. Pedro García se reveló como un pivote contundente con criterio en la salida del balón acompañado por delante por otras dos incorporaciones, Jacobo y Adrián Mouriño. El primero, aún lejos de su mejor forma, cumplió con lo que se espera de él. Y Mouriño, por su parte, dejó los primeros destellos de la calidad que se le presupone. Además, en la izquierda Centrón se destapó como un complemento ideal para Feito en ataque, mientras que en la derecha el capitán, Tubo, fue el único integrante del anterior equipo granate que se gozó de un puesto en tareas ofensivas.

En cuanto a la delantera, Jorge Rodríguez se estrenó en un partido de mucha brega para él, dado que enfrente tuvo una defensa muy seria. De todos modos, se ofreció en todo momento y demostró que su aportación no se limita al área, sino que será un aliado de los centrocampistas para intentar que el balón se acerque a la portería contraria. En todo caso, la ausencia de Pablo Carnero deja el interrogante de si el técnico apostará por uno o dos delanteros, aunque en este último supuesto tendrá que sacrificar a un hombre del medio campo.

Además, también habrá que ver qué responsabilidad tendrán otros fichajes como el veterano central Capi o Anxo, así como referentes del año pasado como Fran Fandiño. Pero, sea como sea, y aún con mucho trabajo por delante, el Pontevedra dejó la sensación de que el discurso de que el equipo apostará por un fútbol más combinativo esta vez no va de farol.