El Ayuntamiento de A Coruña inicia la expropiación de 78 parcelas para ampliar la planta de residuos de Nostián
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El proyecto total costará 22 millones de euros y ocupará 122.000 metros cuadrados más
12 abr 2024 . Actualizado a las 05:00 h.El Ayuntamiento de A Coruña comenzó el procedimiento para expropiar los terrenos necesarios para ampliar la planta de tratamiento de residuos de Nostián, cuya gestión será licitada próximamente por 386 millones de euros a 25 años, pues el contrato actual está prorrogado desde el 2020. Serán 78 las parcelas afectadas por este plan, la mayoría de matorral, y ninguna edificación. Para ejecutar el proyecto, el Concello prevé invertir 22 millones de euros, con cargo a una partida presupuestaria de 30 millones de euros de las cuentas municipales del 2024.
Del total de este importe, según figura en el anteproyecto de adecuación de las instalaciones de la planta a las nuevas normativas, más de 480.000 euros serán para pagar la ocupación del suelo a los propietarios y los 21,5 millones de euros restantes serán para coste del proyecto y su ejecución.
Aumento hacia el este
En el documento se especifica primero que el terreno que debe obtener el Consistorio para hacer la ampliación es de 122.500 metros cuadrados, pero la suma de la superficie de las parcelas que serán expropiadas es de 128.032. Este aumento del tamaño de la planta se hará hacia el este. De hecho, según los planos que maneja la Administración local, las nuevas construcciones se ejecutarán en un ámbito de 114.000 metros cuadrados, hasta limitar con la refinería de Repsol. La superficie que ocupan ahora las instalaciones de la planta de tratamiento de residuos es de 30.000 metros cuadrados, aunque su terreno total es mayor. Aunque todavía no se sabe cuántas edificaciones nuevas habrá, el tamaño de esta factoría aumentará considerablemente. En este nuevo dominio se implantarán, según se detalla en el anteproyecto, «nuevas instalaciones o depósitos de materiales», procurando su integración en el entorno.
Como paso previo a la ocupación del suelo, el Ayuntamiento encargó un informe que evalúa el valor de las distintas clases agrológicas de la zona. Todas las parcelas objeto de estudio se encuentran en el polígono 13 del parcelario del catastro del municipio coruñés y su inspección reveló que hay terreno improductivo, maderable y labradío. Además, se concluye que el monte bajo existente «se puede equiparar al improductivo», ya que no es posible ninguna actividad productiva agroforestal en él. La vegetación existente en esta zona de fuerte pendiente hacia el este es prácticamente tojo y brezo. También hay alguna plantación de eucaliptos en alguna de las fincas de cota más baja. El análisis concluye que se deben pagar 0,42 euros por metro cuadrado en la parte de terreno improductivo; 2,32 en el monte maderable y 8,41 en la zona de labradío.
Con este documento detallado, el área de Economía y Planificación Urbana que dirige José Manuel Lage, solicita a los técnicos municipales del Servizo de Planeamento e Xestión do Solo que procedan a la redacción y tramitación del proyecto de expropiación.
La ocupación de las parcelas es un paso previo a la licitación de la gestión de la planta de Nostián que ahora administra la empresa Albada por 6 millones de euros al año. Si sale adelante la propuesta de pliego que le hizo el Ayuntamiento al Consorcio As Mariñas, el pago del Concello a la nueva adjudicataria se elevará a los 15,4 millones anuales.
Con todo, aunque desde María Pita siguen adelante con la tramitación de la nueva licitación del servicio, la propuesta genera discrepancias, pues esta misma semana los ocho ayuntamientos del área que forman parte del Consorcio As Mariñas avisaron de que licitarán el tratamiento de su basura por separado y podrían abandonar Nostián, lo que haría inviable la continuidad de la planta.
Las instalaciones cumplen 25 años, con un modelo de tratamiento que será modificado
La planta de tratamiento de residuos de Nostián fue inaugurada en 1999, por lo que este año cumple su cuarto de siglo de vida. El motivo de su origen fue un desastre medioambiental: el derrumbe del vertedero de Bens, que además costó la vida de una persona. Estas instalaciones fueron una de las medidas tomadas para que no volviese a suceder una desgracia relacionada con los residuos.
En Nostián se trata la basura de la ciudad de A Coruña y de los municipios de Abegondo, Bergondo, Betanzos, Cambre, Carral, Culleredo, Oleiros y Sada, siguiendo el modelo húmedo-seco, que diferencia los restos orgánicos de inorgánicos y con el reciclaje como uno de sus objetivos.
Cambios en el complejo
Entre los cambios que hará el Ayuntamiento en el complejo, se encuentra la polémica adaptación al quinto contenedor en las calles de la ciudad, que estará destinado a los envases ligeros, para adaptar el modelo a la normativa europea. Esta modificación en el sistema de recogida hace necesarios cambios en la planta para, previsiblemente, dejar de aplicar el modelo húmedo-seco. Muchos colectivos, entre los que se encuentra el BNG —socio de gobierno— se oponen a la medida porque consideran que no ayudará al reciclaje.