El Ayuntamiento retoma en otoño la construcción de la barrera contra las olas por primera vez desde el invierno del 2010
30 oct 2014 . Actualizado a las 05:00 h.La duna de Riazor ya está aquí. Tal y como estaba previsto, dos excavadoras comenzaron ayer a trabajar en la construcción de la barrera artificial, que deberá defender la playa y el paseo marítimo de los embates del mar y los temporales durante el invierno.
Aunque se consideraba una operación de rutina, la construcción de la duna en otoño fue interrumpida en el 2010, cuando después de un gran aporte de arena a la playa se consideró que las olas ya no supondrían un peligro para el paseo y los viandantes.
Sin embargo, la duna, o más bien su falta, estuvo en boca de todos a principios de este año, cuando un tren de ocho borrascas y varios temporales en el mar provocaron importantes daños en varios tramos del paseo marítimo. Para prevenir más desperfectos, el Ayuntamiento decidió construir la duna en abril, ante la posibilidad de que llegasen nuevos temporales. Aunque es improbable que el obstáculo pudiese evitar los desperfectos si se produjese una serie de borrascas similar a la de entonces, el departamento municipal de Medio Ambiente que dirige el edil Enrique Salvador considera que sí podría amortiguar en parte el impacto del mal tiempo.
La duna quedará lista en el plazo de una semana. Se extenderá desde el Playa Club hasta la Coraza y tendrá una anchura de entre ocho y nueve metros. Entre ella y el paseo se construirá un foso, del que se sacará la arena para el obstáculo, de 12,5 metros de ancho que también ayudará a la defensa frente al mar.