De los misterios del IBI

Xosé Vázquez Gago
Xosé Gago A CORUÑA / LA VOZ

A CORUÑA

La ciudad cobra el tercer impuesto más reducido de Galicia, pero el importe total del gravamen depende de más factores

29 oct 2014 . Actualizado a las 05:00 h.

Los coruñeses pagan estos días la última anualidad del IBI del primer mandato del PP en María Pita. Los conservadores destacan que han congelado el impuesto desde que llegaron al gobierno y que lo mantienen en el mínimo legal, pero la oposición les acusa de subirlo igualmente. La polémica viene dada porque el porcentaje que aplican los ayuntamientos no es el único factor a la hora de calcular cuánto paga cada vecino. Estas son las claves del impuesto.

El cálculo

El valor catastral, clave. El Ayuntamiento aplica un coeficiente del IBI del 0,6 %, solo por encima de Santiago y Ourense (0,54 %) y muy por debajo de Vigo (0,884 %). Sin embargo, ese porcentaje solo explica una parte del importe final, que depende sobre todo del valor catastral del inmueble. En A Coruña suelen ser elevados, ya que la ciudad tiene una fuerte concentración urbana y el precio del suelo es alto. Por eso, aunque el Ayuntamiento haga todo lo que está en su mano congelando el impuesto y aplique un porcentaje mínimo, la factura final puede ser más elevada que en ciudades donde el porcentaje aplicado es más elevado.

El proceso

Hasta el 5 de diciembre. El período de pago voluntario termina el 5 de diciembre. A partir de ahí se aplica un recargo del 5 %. Si el pago no se resuelve en unas semanas, el Ayuntamiento envía apremios a los deudores y les carga un 10 % extra. El siguiente paso incluye un aumento del 20 % más intereses y medidas coercitivas. Los casos de impago son pocos, casi el 90 % de los coruñeses pagan en el período voluntario, y suelen resolverse por completo antes de marzo del año siguiente, cuando se liquida el impuesto de vehículos a motor (IVTM).

El resultado

Ingresos clave. El IBI es una de las principales fuentes de ingresos del Ayuntamiento. Este año se liquidarán 166.401 recibos, lo que originará unos 60.150.000 euros para las arcas municipales. El importe ha crecido con respecto al año anterior, pero el edil de Hacienda, Roberto Coira, insiste en que no ha aumentado la presión fiscal, sino que hay más contribuyentes. Solo en el 2013 se dieron de alta para pagar el impuesto 3.115 vecinos más. El concejal contrapone la congelación de la tasa aplicada en A Coruña con los aumentos experimentados en Vigo desde el 2011, donde ha crecido un 5,9 %, aunque ahora Caballero anuncie una bajada de la tasa desde el 0,884 % al 0,872 %, coincidiendo con el año electoral.

Los otros

Pocas tasas al máximo. Según los datos del Servicio de Gestión Tributaria del Ayuntamiento, A Coruña solo tiene tres impuestos entre los más altos de las ciudades gallegas. El más destacado es el de obras y construcciones, que llega al 4 %, por encima del 3,5 % de Vigo o el 1,9 % de Santiago. También son más elevados las tasas sobre ciclomotores o turismos de menos de ocho caballos. En el resto de las tasas de vehículos o por otros conceptos Vigo está por delante.