Los hosteleros aseguran que este año los visitantes gastaron menos
02 sep 2014 . Actualizado a las 07:00 h.Los hosteleros coruñeses despidieron agosto con una sensación agridulce. Si bien es cierto que A Coruña vivió un gran tirón turístico este año, especialmente en los meses de verano, no todos los empresarios de la hostelería vieron reflejado ese aumento en la caja registradora.
Las fiestas de María Pita y las celebraciones y actividades que se viven en la comarca durante el verano tienen gran interés turístico. Durante el mes de agosto era difícil pasear por la calle de la Barrera o la Franja sin ver a un gran número de viajeros disfrutando de la ciudad. Los hosteleros reconocen que las fiestas son una inversión con retorno, ya que generan un gran flujo de visitas, pero una buena parte del dinero que gasta el turista se lo llevan las Casas Regionales y el Oktoberfest. «Las casetas han causado un daño terrible al sector hostelero de la ciudad; sin pagar tasas y disfrutando de una localización céntrica, se convierten en una competencia desleal que quita clientela a los negocios coruñeses», comenta Héctor Cañete, presidente de la Asociación Provincial de Hostelería. A esto hay que sumarle la retracción del consumo por parte de los visitantes debido a la situación de crisis, que «gastan menos en salir a comer o cenar».
Los dueños de establecimientos del centro reconocen que este año hubo más turistas que nunca, «especialmente alemanes», según la trabajadora de una heladería. Sin embargo, ahora que los conciertos de María Pita quedan atrás, empiezan a notar el cambio. «Hacemos hasta 200 euros menos de caja al día, la mayoría se han ido», apunta esta hostelera. En el balance realizado hace días por Cultura sobre las celebraciones de María Pita 2014 se había cifrado en 2,5 millones el número de asistentes y se había considerado esta cifra un «éxito rotundo».
Buenos resultados en hoteles
En lo que a hoteles se refiere, A Coruña puede presumir de continuar a la cabeza de las ciudades que registran el mayor número de viajeros y pernoctas. Ya antes de comenzar el verano, la ciudad había recibido a más de 30.000 turistas, lo que supuso un aumento del 7 % con respecto al mismo período del 2013. Además, la provincia registró la cota más alta de ocupación hotelera en julio, aumentando un 5,1 %.