«Arte suave» para curar el pie zambo

Rosa Estévez
rosa estévez VILAGARCÍA / LA VOZ

AROUSA

MONICA IRAGO

Este sábado, en Vilagarcía, se impartirá un taller de defensa personal de la disciplina brazilian jiu-jitsu con el que se pretende recaudar fondos para operar a diez niños de Camerún

16 ene 2024 . Actualizado a las 05:00 h.

El pie zambo es una de esas enfermedades raras que no lo son tanto: afectan a una de cada mil personas. En nuestro entorno, suele pasar desapercibido: se diagnostica en el momento del nacimiento y se trata desde tan temprano, que suele corregirse sin que nadie se dé cuenta. Pero hay otros lugares del mundo en el que las cosas son diferentes: quienes nacen con esa malformación la arrastran toda la vida. Problemas de movilidad, estigma social... El pie zambo es casi una maldición para quienes nacen, por ejemplo, en Camerún, donde un equipo de profesionales sanitarias, agrupadas en el llamado Equipo Nómada, están desarrollando un programa que pretende cristalizar, en el mes de febrero, en la operación de diez niños y niñas que presentan esta malformación. Serán sometidos a una cirugía conocida como Método Ponseti, una operación eficaz y que exige unos cuidados posoperatorios sencillos: quienes se van a encargar de impartirlos no tienen recursos.

Iria Somoza es una de las podólogas que forman parte del equipo Nómada. Y es, también, alumna del Dojo Berserkers, un gimnasio en el que se imparten clases de brazilian jiu-jitsu, un arte marcial conocido como «arte suave», según explicaba ayer Fátima Diz, una de las responsables de este establecimiento. En este local, que aspira a ser más que un simple centro deportivo, un centro de autocuidado, surgió la conversación sobre el proyecto de la oenegé sanitaria y la necesidad de reunir 4.000 euros para poder llevar a cabo la acción prevista en Camerún. «No había nada que pensar, y menos habiendo niños de por medio», explicaba Fátima. Enseguida surgió la idea de hacer un taller solidario de autodefensa dirigido a mujeres; «consideramos que es la disciplina más eficaz para conseguir este objetivo». Y así comenzó a fraguarse el evento que este sábado, de cinco a siete de la tarde, se celebrará en las instalaciones ubicadas en A Escardia.

Consistirá este, básicamente, en aprender y enseñar, o viceversa, algunos movimientos que puedan resultar útiles a cualquier persona que se encuentre en una situación de riesgo. «Obviamente, está claro que con dos horas de formación nadie va a salir de aquí siendo un especialista», explica Fátima Diz. Pero confía en que la sesión, que cuesta 20 euros, sirva para «que a la gente le entre el gusanillo» por una disciplina deportiva en la que se puede iniciar cualquiera «sin que sea necesario mucha fuerza, ni una especial condición física». Hace falta reunir a 70 personas para que el evento consiga reunir la parte del dinero que necesita el equipo Nómada, que en otros lugares está organizando otro tipo de acciones para intentar reunir el dinero preciso para abordar las diez operaciones que están programadas.

Pero no todo va a ser ejercicio este sábado. Tras las dos horas de entrenamiento, habrá fiesta. De animarla se encargará otra mujer vilagarciana, Señora DJ, que pondrá la música al tramo final de la velada, pensado para que quienes se sumen al evento tengan un momento para interactuar, charlar, conocerse y tejer redes.

El concejal de Deportes de Vilagarcía, Carlos Coira, mostró ayer el respaldo del Concello a este tipo de eventos que conjugan todo lo bueno del deporte: actividad física, solidaridad, fomento de las relaciones sociales... «As Administracións públicas estamos para botar unha man a quen toma este tipo de iniciativas», señaló Coira. Ahora solo falta que llegue el sábado, que el tatami se llene y que la más suaves de las artes marciales consiga ayudar a diez rapaces de Camerún con pie zambo.